LA BATALLA ESPACIAL DE ALES VILLEGAS
LEONARDO CASAS - 2011
http://www.babylonprojects.com/
DE LOS USOS Y SENTIDOS DE ALES VILLEGAS
LEONARDO CASAS - 2011
http://www.babylonprojects.com/
“Batalla Espacial” es un proyecto que la artista chilena Ales Villegas comenzó a gestar en el año 2008.
“Batalla Espacial” es una narración, una materialización y, también, un desborde. Un desborde que se produce desde el centro hacia los extremos: una explosión con ecos extrañamente épicos, dentro de su rigor plástico y filosófico.
“A” se ha ido a vivir a un departamento, ignorante de lo que el futuro le depara: en ése lugar se producirá la gestación (in)esperada de una poderosa e invasiva criatura. De la misma forma que la exótica y seductora flor misteriosa que crece alimentándose con los cuerpos que el devoto Seymour Krelbron le lleva cada noche en “La Pequeña Tiendita del Horror”, el cuerpo que “A” ha creado demanda cada vez más espacio, sin importar la seguridad fisica y mental de su creadora, un inesperado final se aproxima…
Las obras que construyen el cuerpo de “Batalla Espacial” consisten en estructuras “im-posibles” realizadas en cartón piedra. Su supervivencia se supedita a la pugna que éstas emprenden por el espacio, entre aspectos y consideraciones, tanto físicas como mentales: la obra se va desplegando inexorablemente hasta ocupar totalidades y re-plantear toda consideración de formato y escala. Los espacios arquitectónicos son virtualmente fragmentados en sus autocontención, devorados en su propia “auto confianza” por el trabajo de la artista.
El arte contemporáneo ha dejado, hace rato, de ser un asunto de relación entre objeto e idea, vivimos en un momento donde se producen problemáticas (a veces insolubles) generadas en la posibilidad de relaciones que se producen en contexto entre mecanismos discursivos y visuales, entre estética e individualidad, entre gusto y políticas de acción o simplemente entre privacidad y obligación pública.
Somos testigos de una ética basada en una diabólica sinceridad y en un impulso en contra del autoritarismo de la autoría a través de acciones individualizadas y tácticas de re-posicionamiento ideológico. En la producción de Ales Villegas, el “difuminamiento” resultante, a través de éste planeado asalto a éstos espacios, pensados originariamente para la escala humana, se plantea como una dinámica oscilación entre lo armonioso y lo discordante de la ficción cuando se devora a la realidad.
EXTRACTO DEL TEXTO DE LA MUESTRA "FRAGMANTOS DE ORDEN"
PABLA UGARTE - 2010
DE LOS USOS Y SENTIDOS DE ALES VILLEGAS
Sentido de existencia. En estos últimos años de mi vida he estado creando y recreando un “monstruo” de cartón piedra en distintas casas-talleres donde he vivido y fundado mi obra, la cual ha crecido de manera tal que primero ha expulsado mis pertenencias, para finalmente expulsarme de esos espacios, siendo derrotada por este “monstruo”. Pero, aunque he sido vencida por mi propia creación, lo que me mueve a construir y reconstruir la obra una y otra vez, es mi propio deseo de consistencia, de sentido en el mundo. Esto concierne a mis propios “monstruos mentales” y su expansión, que a nivel personal manifiestan al ser humano; en su terror al estado de cosificación, a la lucha constante entre cosa-objeto y a la relación contaminante del hombre con su hábitat. Mi obra, llamada Batalla Espacial y yo somos uno solo, es mi némesis.
Sentido de extrañeza. Batalla Espacial es una reflexión sobre el material, esto es, el cartón piedra. Por tanto, es confrontar lo útil con lo inútil. El ser humano está dado en relación a su entorno con respecto a las cosas que construye; las nombra y les da una materialidad y utilidad. Batalla Espacial, en ese sentido, reinterpreta lo anterior, usando formas conocidas para darle nuevos usos: de sentido, de formas, de coexistencia. Se plantea, por tanto, en el límite de lo conocido y lo desconocido, cuando la cotidianeidad se hace extraña y aterradora.
Sentido de mutación y regeneración. La Batalla Espacial (obra-objeto-monstruo) siempre está en constante crecimiento. Empero detrás de un “objeto” siempre hay un sujeto, una existencia humana que es efímera y frágil, pero capaz de adaptarse y superarse, por tanto mutar y regenerarse. Cuando el ser humano muta lo hace también con sus propios monstruos. Por tanto, cada Batalla Espacial es distinta de la anterior, porque este “monstruo” es también distinto al anterior. Nunca se sabe cuál será la forma definitiva ni cuánto va a crecer y expandirse. Nadie sabe dónde va a crecer y, como esporas, se dispersará, regenerará y crecerá por el mundo.
PROTOOBJETOS PARA NEOHOMBRE
VLADIMIR RIVERA ORDENES - 2009
VLADIMIR RIVERA ORDENES - 2009
1. Del cuerpo escultórico enfrentado a las divagaciones del lenguaje.
¿Podrán las cosas dejar de ser cosas? ¿Sabe el objeto que es objeto en cuanto las cosas saben que son cosas? ¿Qué sienten los electrodomésticos cuando los desenchufan?; ¿Se pueden regenerar los objetos cual organismos vivos? ¿Podrán los objetos sobrevivir al hombre, eterno y final?. Preguntas que es necesario formularse al momento de analizar la obra BATALLA ESPACIAL.
2. Del recorrido y el universo de la artista.
Pero ¿cuál es el universo de Ales Villegas en su Batalla Espacial?. La obra se plantea como un recorrido, compuesto por una acumulación de cosas-objetos o “proyectos de objetos”, según la autora “embriones”, los cuales se “toman” lugares o recintos, como esporas u hongos o virus mentales, obligando a los visitantes/exploradores a recorrer el espacio. Cada visitante es obligado a perderse en los laberintos de la memoria. Es por tanto, un ejercicio de memoria y olvido, de divisiones espaciales, de percepciones. De ahí viene el título, pues el individuo es sometido a una verdadera batalla. Hombre-objetos enfrentados en una lucha de sobre vivencia.
3. De los protoobjetos y la anatomía cosística.
¿De qué clase de monstruos estamos hablando?. Como otrora Andrés Vesalio, anatomista del imperio, quien en su obra se preocupó de realizar un estudio acabado del cuerpo humano, Ales Villegas lo hace de los objetos-embriones, protoobjetos y, con paciencia de anatomista de objetos, los une, los replica, los estudia y tal cual los renacentista, descubriendo el cuerpo humano, se sentían asombrados, Ales Villegas, lo hace en su batalla espacial. Ales Villegas hace ciencia de una ciencia que no existe.
La obra destaca la importancia de la disección y de lo que alguna manera se podría llamar la visión "anatómica" del cuerpo cosístico y escultural, el que se regenera cual ser vivo, en distintas partes del recinto, en este caso Galería Die Ecke. Sin embargo, lo más curioso del caso es que este monstruo es de cartón piedra. ¿Por qué este material?. Será porque los objetos, maquetas, cansados de la materialidad, de la utilidad, de la compra-venta han decido mutar en una especie evolutiva carente de las motivaciones e intensiones por las cuales fueron concebidas.
4. De las mutaciones humanas y de la sobrevivencia de los objetos.
¿Podrán los objetos sobrevivir al hombre, eterno y final?. La Batalla Espacial se presenta como un multiverso. El Universo ya no es tal. En esta obra, no hay uno si no varios mundos, múltiples miradas; por ende multiplicidad de viajes en su recorridos. Eso mismo obliga al individuo a mutar, a dejar de ser uno. Para recorrerla física y mentalmente debe dividirse. Por tanto, el individuo, la ontológica del ser, se transforma en un dividio. Como los protozoos, los seres humanos se deben dividir en especies similares a sí misma, mutar, y quizás así sea la única manera de luchar contra este monstruo mental. Es un monstruo de protoobjetos para neohombres.
Sin embargo, según Ales Villegas hasta los dividios pierden en la Batalla Espacial.
ENTREVISTA
RICARDO PIZARRO - 2009
FUNDAMENTO
ALES VILLEGAS - 2009
Batalla Espacial es una obra que remite al mundo del diseño (objetos) y la arquitectura (maquetas de ciudades) por lo tanto, sistemas de orden semánticamente predeterminados y adquiridos, y a partir de esas relaciones se construye una obra de imaginario difuso, indeterminada, en constante mutación. Batalla Espacial es como una semilla de cartón piedra que crece, regenerándose permanentemente, sin orden ni categorías dadas y como la obra Merzbau de K. Schwitters, toma para sí un material innoble, para resemantizarlo, y construir con él un nuevo mundo material, alimentándose de sí mismo, llevando el soporte material a múltiples formas y “posibles usos o sentidos”. Batalla Espacial es una obra monomaterial y poliforme que se apodera del espacio de manera caótica, tolerante a la libre contradicción, como una existencia combativa entre el cartón piedra (maqueta-origen) y la arquitectura de la que se va apoderando (recinto-hábitat), colapsando cada espacio en que es construida y exhibida. Batalla Espacial, finalmente, es una reflexión sobre la lucha constante entre cosa-objeto, entre cuerpo (recipiente) y mente (expansión), sobre el estado de cosificación y sobre el ser humano contaminante del hábitat; pero al mismo tiempo esta obra es protagonista material de una historia silente que revela el paso del tiempo, lo efímero y frágil de la existencia humana.
SOBRE LA BATALLA ESPACIAL
ALES VILLEGAS - 2008
Desde el proceso de construcción: esta obra se construye desde la morfogénesis del objeto, esto es como si “El proyecto de objeto” fuese una semilla y siguiese el camino de construcción, similar a como la flora se apodera de la naturaleza; en este caso es como si lo objetos se apoderarán de las construcciones, de la ciudad. En este sentido “el objeto” se presente como una mente viva que se construye a sí misma, se da forma, se da a sí misma diferentes recovecos y en este caso, el espectador, como explorador, tiene la posibilidad de recorrerlo, conocerlo, reconocer y darle múltiples interpretaciones. Por lo tanto, la obra es muro, es objeto, es máquina; pero al mismo tiempo es como “un dios” apoderándose de la ciudad.
Desde el espectador: La obra se presenta como un laberinto en el cual el espectador tiene la posibilidad de recorrerlo, apreciarlo, distinguir algunas formas, jugar siguiendo la ruta que los mismos objetos, apoderados unos de otros, como brazos, como cuerpos imbricados, han marcado. En este caso, el espectador tiene la posibilidad de reconocer algunos objetos-miembros de esta naciente máquina, pero vista de desde diversas perspectivas. Entonces, surge la extrañeza; entonces surge el desconocimiento de lo cotidiano; entonces surge el temor.
Desde la obra: La obra se construye desde el propio espacio del cual emerge; esto es que hay una relación dialógica entre la obra y la arquitectura misma. En este sentido, la obra está dada por mini arquitecturas, monocramáticas, monomateriales, que al mismo tiempo son microcosmos, habitad cosificados y cosificadores, miembros, apéndices, de esta misma, y que como, en la naturaleza, se adhieren a sí misma para formar otra cosa, mayor aún que sus partes, vivientes, pensantes. Por tanto, la obra, al emerger desde el espacio lo inunda, lo llena, y, por sobre todo, lo rebalsa, siendo (esta obra), un espacio abierto a la interpretación. Entonces, nos preguntamos ¿qué es?. ¿Arquitectura? ¿objeto? ¿cosa?. En el multiverso de interpretaciones, la obra asume vida propia y en cada uno de los recovecos vuelve a mutar para ampliar aún más las interpretaciones.
Desde el espectador: La obra se presenta como un laberinto en el cual el espectador tiene la posibilidad de recorrerlo, apreciarlo, distinguir algunas formas, jugar siguiendo la ruta que los mismos objetos, apoderados unos de otros, como brazos, como cuerpos imbricados, han marcado. En este caso, el espectador tiene la posibilidad de reconocer algunos objetos-miembros de esta naciente máquina, pero vista de desde diversas perspectivas. Entonces, surge la extrañeza; entonces surge el desconocimiento de lo cotidiano; entonces surge el temor.
Desde la obra: La obra se construye desde el propio espacio del cual emerge; esto es que hay una relación dialógica entre la obra y la arquitectura misma. En este sentido, la obra está dada por mini arquitecturas, monocramáticas, monomateriales, que al mismo tiempo son microcosmos, habitad cosificados y cosificadores, miembros, apéndices, de esta misma, y que como, en la naturaleza, se adhieren a sí misma para formar otra cosa, mayor aún que sus partes, vivientes, pensantes. Por tanto, la obra, al emerger desde el espacio lo inunda, lo llena, y, por sobre todo, lo rebalsa, siendo (esta obra), un espacio abierto a la interpretación. Entonces, nos preguntamos ¿qué es?. ¿Arquitectura? ¿objeto? ¿cosa?. En el multiverso de interpretaciones, la obra asume vida propia y en cada uno de los recovecos vuelve a mutar para ampliar aún más las interpretaciones.
ALES VILLEGAS - 2008
ALES VILLEGAS - 2008
Batalla Espacial trata sobre los monstruos mentales, la lógica difusa y los hipervínculos. La obra es de cartón piedra y parte de un objeto en estado embrionario que va creciendo en el espacio, hasta finalmente expulsar a la creadora. La primera experiencia de esta obra fue realizada en su departamento y le llevó más de un año construirla. En este mismo sentido, la obra fue creciendo, mutando, “monstruosiándose” de tal manera que la artista terminó con sus pertenencias en la calle y durmiendo sobre una frazada.
ALES VILLEGAS - 2008
Ales nació en Quinta Normal, creció normal y sin motivaciones claras. Sin saber que hacer con su vida estudio diseño, arquitectura (carreras que no terminó) y luego arte. Poseída por su propia indefinición Ales comenzó a construir monstruos embrionarios con cartón piedra. Los monstruos pareciera que cobran vida propia. Ales no puede existir sin ellos. Ales vive y trabaja en Santiago de Chile, en distintos barrios de esta ciudad. La razón de sus constantes cambios de casa es que sus monstruos se van apropiando de los lugares donde ella habita. Ales lucha con ellos, pero siempre pierde. Pierde la batalla espacial.
